Descendiente de Moctezuma
y de humilde cuna mexicana
A tí mi México he de cantar
y a mi sangre azteca he de alabar.
Bellísimo sin duda es tu himno
que da libertad de elegir camino
tus montes de cedro, nogal y pino
comparten con el mundo su oxigeno.
Hidalgo y Costilla nos dió valor
para luchar contra el invasor.
Emiliano Zapata siguió su lucha
para que el pobre tuviera su propia cosecha.
Benito Juárez escribió leyes
y su justicia vigilan los jueces
y en un ambiente de paz
vivimos y convivimos todos los demás.
En tí he de admirar las pirámides
y la belleza de grandes ciudades.
La pureza y gloria de tu historia
que a la mitología griega nada le envídia.
A tus futbolistas inocentes
por su lucha y preparación constante
A tu juventud estudiante
y a la hospitalidad de su gente.
A tus danzas y bailes regionales
a tus tacos de frijoles con nopales
a bellas y talentosas mujeres
y a sus hombres honestos y cabales.
¿Qué es lo más fértil de tu abono?
el ansia y sudor de tu colono
o el torrente de sángre mártir
con que tus héroes han ahogado al
invasor.
No hay patria como mi patria
qué firme el ideal de tu evolución
qué palpable y exitosa tu industria
y qué humano el fondo de tu
revolución.
¡Oh patria mía!, ¡Oh patria inmensa!
esté donde esté, mi mente en tí piensa.
Alzémos nuestro lábaro en el asta
y mostrémos al mundo nuestra casta.
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